Me acuerdo mucho de tu abuelo y de su figura,
sentado en el suelo en aquel reó porque no tenia mas remedio, con su mascota y su botellita de vino de la
bodega del gallo, su gran corral de cabras y el chivitin que era como un cajón
de madera grande donde se metían los chivos pequeños recién nacidos. La calle
era casi toda de arena y mas para abajo los orines de las cabras buscaban el
camino del callejón lejío que recogía todas las pestes y porquerías de la calle
para llevarlas al rió iro. Y una considerable superficie de la calle y de corral era
adornada por cagarrutas y cagarrutas de aquellas limpias cabras.
Acciones, reacciones, actitudes y comportamientos que por mucho que se programe, se organice, se planifique, se plantee, por mucho, entusiasmo y filosofías magistrales. jamas podrá dejar de evidenciar que no fuiste mas que una insignificante y remota partícula en el cosmos, y para colmo con opinión intrascendente e irrelevante atrapada por un cumulo de inevitables circunstancias acaecidas que lucharan y lucharan contra ti, tu y tu yo personal durante el tiempo que dura una eternidad.
miércoles, 31 de julio de 2013
jueves, 4 de julio de 2013
Sugerencia culinaria (Los Caracoles)
Siempre me pregunte si las actividades culinarias se
podían considerar arte pero ante esa perpetua duda y para salir de ella es
probable que tengamos claro que más que las actividades culinarias habría que
analizar lo que realmente se pudiese definir como arte.
Ya que existe el tópico de que el arte no tiene
fronteras y que se puede analizar como toda forma que manifiesta el ser humano
para expresarse y hacer sentir emoción hacia otro ser humano, tengo que admitir
que un plato de caracoles es en mi
tierra algo más que emotivo.
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