Recuerdo de una memoria (Destacado deportista)

En cualquier deporte que practicara en mis años de niñez y de joven destacaba. Destacaba una cosa mala con el resto de todos. Era algo único.

Por ejemplo, había que jugar un partido de futbol y los dos capitanes elegían a sus equipos, entre los dos pisaban hacia delante adelantando una suela con la otra y el que pisase al contrario por encima pues le tocaba elegir primero y yo siempre quedaba el ultimo y de pico. Pues eso mismo al final se ponía a elegir y terminaban peleándose los dos por mí.

Uno decía: te toca a ti de llevártelo y el otro decía que no que ya el me había elegido el día anterior, entre uno y otro discutían para no cargar conmigo y se formaba casi siempre una bronca entre los dos capitanes para ver quién de los dos jugaba con la ventaja de no estar conmigo. Y yo me tenía que meter y al final de la pelea decía yo pues para ninguno de los dos, ahora ya no juego y los capitanes me decían a la vez “muchas gracias picha”

Aquel día el partido estaba bastante equilibrado y en aquellos partidos nunca había empate, o ganaban uno o ganaban otros. El que metiese antes 10 goles pues ganaba y recuerdo que no se si era en un partido o en otro que metí dos goles, uno en cada portería.

A lo que me refería que recuerdo un partido muy equilibrado que al final perdimos. Por los pelos, El marcador era de 9-9 y mi capitán era el mejor, mejor zancada, mejor toque, mejor control, mejor técnica, mejor chute y mejor y mejor en todo hasta en su inteligencia era la mejor es por lo que me llego a decir:

Ponte en la delantera a ver si así obstaculiza a la defensa contraria, lo pone nervioso y los confunde porque pa eso te apañas como tú solo y que no te vea por aquí cerca. Yo lo tome como un alago y allá iba yo y aquella defensa contraria pasaba nunca mejor dicho olímpicamente de mi como si yo no estuviese, y yo no sabía qué hacer para llamar su atención porque resulta que en esos partidos no había fuera de juego, algunos me insultaban y me decían “Orcidero que eres un orcidero”

Yo pasaba de todo y en un lance del juego la pelota se me quedo en los pies y la portería a bocajarro como así se decía, tire y di en el larguero, revotó pa mi y me dio en el pecho, quedándome muerta otra vez en mis pies, chute pero la patada la di en el aire y un defensa contrario despejo, mal como pudo rastrera baja y lo vi venir.

La pelota iba recta y lentamente hacia los pies de mi capitán que venía a tiro hecho para armar su pierna derecha y marcar el 10-9 y ganar el partido. Y pensé: No se pa donde corre y corrí para dentro de la portería era el único lugar donde no podría desvaretar tan lindo chute de gol. Mientras corría y antes de llegar a la raya de la portería oí el contacto del balón y el empeine y me dio tiempo a pensar: Esto no lo para nadie.

El balonazo dio de lleno en toda mi espalda y la pelota cayó al suelo muerta para que el portero la agarrara con toda sus fuerzas.

A lo lejos cerca del lugar de la pena máxima mi capitán de rodillas, hundido y abatido golpeando con las dos manos la zahorra y gritando y maldiciendo.

Lentamente se levanto se puso en pie quieto unos segundo mirándome y yo le respondía la mirada hasta que arranco a correr para mí como un osborne negro y yo corriendo dándole vueltas a la portería mientras el intentando darme una patada en el culo al ser mayor que yo y con mas fortaleza y estatura corrí y corrí dándole vuelta a la portería mientras me decía no lo hay no lo hay igual que tu es que no lo hay.
Un profesor del colegio llego un día a decir de mi:
Este chico puede ser que llegue lejos pero mas nos vale que lo haga cuanto antes.
Y es que créanme pero en esto del deporte siempre destaque bastante.