
El caso es que
para que disfrute un niño yo hasta mato y fue por eso que hice ese sacrificio y
fue la única ocasión que tuve de ir y no dejo de acordarme el buen recuerdo que
tuve de aquel día.
Paseaba con mi
niño de seis o siete añitos viendo toda clase de animales y a la fecha que
estamos créenme que solamente me acuerdo de uno de ellos, era un mono
chimpancé, orangután, gorila, primate o yo que sé, el caso que el pobre mono
estaba encima de una rama con la mirada perdida al igual que yo que lo tenía
enfrente.
Un Nota, un
fulano, un nene, un carajote por así llamarlo porque esta clase de gente la
verdad es que no se puede catalogar, se acerco con un chándal blanco y unos
deportes de marca y un paquetito de alvellanita de esas con cascara y no tuvo
otra cosa que tirarle al mono con la avellanita y darle en to lo hocico y dejo
al animal rascándose con las dos manos y gritando emberrechinao.
El tío se partía
de risa a carcajada y yo le volví la espalda y me fui por no amargarme la
mañana allí se quedo el tonto polla metiéndose con el animal y lanzándole
alvellanita. Seguimos dando vueltas y cuando menos lo esperamos escuchamos un
escándalo de gente y bocinazos e insultos y nos acercamos y no vea la escenita.
El tonto polla
estaba con el chándal, los pelo y hasta los zapatos embarrao en mierda con un
pestazo y limpiándose la cara de mierda con un pañuelo cagandose en los muerto
del mono e insultando a los encargados del zoo que se acercaron, no vea como olía
el tío a mierda fresca, también amenazando a la dirección del zoo por no tener
suficientemente protegidas las jaulas. El mono le había hecho un traje de
mierda.
Y yo me
preguntaba pero ¿cómo puede ser, como puede ser?
Y uno de allí
que lo vio todo me lo explico con todo detalle:
Vera usted el tío
vaina no paraba de meterse con el mono y el mono estaba ya cabreao y mire usted
las manos del mono resulta que son más larga de la cuenta, bueno pues el mono
se abrió de patas y se puso las dos manos abajo del culo y este tío no paraba de reírse, el mono
rápidamente se cago en las manos y amaso la majá con sus manos y con mucho arte
pasándose de izquierda a derecha y de derecha a izquierda y cuando formo la
pelotilla. El tonto polla empezó a reaccionar pero era demasiado tarde, la
sonrisa de dientes no le dio tiempo siquiera ni de ocultarla, no vea como ese
mono le tiro en toa la cara la maja de mierda que le dio de lleno y le salpico
hasta los que tenia al lado.
Y esa era la
escenita con un pañuelo limpiándose la cara, la mujer pidiéndole que se fuera y
el tio insultando al mono le dijo de to ¡cabron, hijoputa, tu puta mare! y el
mono allí con la mirada perdida tan tranquilo como si la cosa no fuera con él.
El origen. Chiclana de la frontera.
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